Autofagia: ¿ayuda el ayuno a combatir el proceso de envejecimiento?
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¿El término “autofagia” todavía no forma parte de tu vocabulario? A raíz de la popularidad del ayuno intermitente, cada vez se habla más de fenómenos como este. Pero ¿cuál es la relación entre ayuno y autofagia? Te contamos en qué consisten estos procesos y cuáles son sus beneficios para ti y tu cuerpo.
¿Qué es la autofagia?
Los seres humanos anhelan la eterna juventud desde hace siglos. Nuestro cuerpo es capaz de renovarse de forma totalmente natural o, más concretamente, de renovar sus propias células. Este fenómeno se denomina autofagia o autofagocitosis y proviene del latín “auto” que significa “por sí mismo” y del griego “phagein” que quiere decir “digerir”.
Gracias al estudio de los mecanismos de este fenómeno, el biólogo japonés Yoshinori Ohsumi ganó el Premio Nobel de Medicina en 2016. A partir de células de levadura, estudió con precisión los procesos que tienen lugar durante la autofagia y su papel en la salud de los seres humanos y pudo demostrar el efecto de la renovación celular.
Entonces, ¿cómo funciona exactamente el rejuvenecimiento celular?
El organismo no desperdicia ningún recurso. Los elementos dañados o defectuosos, como las proteínas mal plegadas o los componentes individuales de las células, se degradan de manera específica y se reutilizan. Por lo tanto, tu cuerpo tiene su propio sistema de reciclaje.
La autofagia es un fenómeno completamente natural para las células y es responsable de su calidad. Imagina que dentro de una de tus células hay algún elemento que ya no funciona correctamente. Este residuo celular entonces se degrada y sus restos químicos se reutilizan. Dentro de la célula, alrededor de estos desechos, se forma una doble membrana.
Esta estructura esférica se llama autofagosoma y, en este punto del proceso, se fusionará con un lisosoma, es decir, una burbuja dentro de la célula que contiene ciertas enzimas y se utiliza para degradar sustancias extrañas o sustancias endógenas (específicas del organismo). Estas enzimas descomponen los desechos celulares y el material reciclado se utiliza para producir nutrientes u otras moléculas esenciales para el metabolismo celular.
¿Cuáles son los efectos de la autofagia?
Además de controlar la calidad de las células, la misión de la autofagia es poner a disposición del cuerpo nuevas moléculas, como aminoácidos, ácidos grasos o carbohidratos. Por ejemplo, una proteína se descompone en aminoácidos, que pueden reutilizarse para formar nuevas proteínas. En consecuencia, el cuerpo se renueva y se limpia.
El sistema inmunológico también se beneficia. Gracias a este fenómeno, los patógenos o sustancias extrañas que han entrado en la célula pueden volverse inofensivos. La autocuración de las células es un tema de gran interés en la medicina, donde se estudia para poder combatir diversas enfermedades neurodegenerativas, como el Parkinson o la enfermedad de Huntington.
¿Cuándo tiene lugar la autofagia?
En el organismo, los procesos de reciclaje tienen lugar constantemente. En circunstancias normales, la actividad es baja, pero ciertos factores pueden intensificarla. Uno de los principales desencadenantes de la autofagia son las situaciones estresantes (por ejemplo, en caso de daño celular severo). Esto puede activar el proceso de autofagia o incluso provocar la apoptosis, es decir, la muerte celular programada. Esto permite en particular destruir células potencialmente dañinas4.
Cuando hay una deficiencia de nutrientes, este fenómeno también se refuerza. Sobre todo contribuye a este efecto la falta de aminoácidos. Si el organismo tiene suficientes aminoácidos disponibles, se activa un determinado complejo proteico llamado complejo mTOR (diana de rapamicina en células de mamífero), lo cual evita que se dé la autofagia. El complejo mTOR desencadena, entre otras cosas, la síntesis proteica.
Pero ¿podemos activar la autofagia de forma específica para beneficiarnos de la renovación y la autolimpieza de las células? Hay opiniones diversas al respecto en el ámbito científico y este tema es actualmente objeto de estudio. A continuación te contamos qué factores podrían estimular la autofagia, según algunos estudios.
El ayuno
Seguro que ya has oído hablar del ayuno intermitente, ¿o no te suena de nada? Básicamente, consiste en privarse de alimentos de forma temporal. Hay diferentes formas de hacerlo. La más conocida es el método 16/8, que consiste en no comer durante 16 horas y luego consumir las calorías del día durante las 8 horas restantes. También existen otras formas de ayuno, como la dieta del guerrero, que es un poco más extrema. En esta dieta, solo tienes 4 horas para comer y luego ayunas durante las 20 horas restantes.
Consejo de nuestra redacción: Tanto si haces el ayuno intermitente como si simplemente llevas una dieta equilibrada, es importantísimo aportar a tu organismo vitaminas y nutrientes. Si te resulta complicado consumir suficientes frutas y verduras a diario, prueba nuestras cápsulas Daily Vitamins, que te pueden ayudar a satisfacer tus necesidades.
¿Cuál es la relación entre ayuno y autofagia?
Cuando te privas de alimentos durante mucho tiempo, tus niveles de insulina se mantienen bajos en todo momento. El organismo recibe la señal de que ya no obtiene suficiente energía a través de los alimentos y comienza a utilizar sus propias reservas.
En ese punto, se utilizan las reservas de glucosa de los músculos y el hígado, así como las células grasas. Luego llega el turno de las estructuras celulares dañadas y comienza precisamente la autofagia. La degradación de estas estructuras permite disponer de nuevas reservas. Y viceversa: si comes con mucha frecuencia, no pueden tener lugar estos procesos.
¿Qué pasa cuando ayunamos durante 16 horas?
La mayoría de las personas que hacen el ayuno intermitente eligen el método 16/8. Es el más fácil de realizar porque es el que mejor se adapta a la vida cotidiana. Por ejemplo, si nos saltamos el desayuno, es mucho más sencillo pasar 16 horas sin comer. Pero ¿16 horas son suficientes para activar la renovación celular?
¿A partir de cuántas horas comienza exactamente la autofagia? Todavía no tenemos una respuesta definitiva para esta pregunta. Mientras hay quienes opinan que el fenómeno comienza a partir de las 12 a 16 horas de ayuno, otros afirman que el proceso se activa después de 72 horas sin comer.
Por otro lado, un estudio sostiene que hay una correlación entre la autofagia y el proceso de envejecimiento. Este estudio afirma que, debido a su gran importancia fisiológica en procesos como la limpieza celular, la autofagia también puede retrasar el envejecimiento. Se enfatiza asimismo la importancia de las comidas y su frecuencia: según el período de ayuno, la autofagia o se estimula o frena.
El café
¿Te gusta tomar café? Entonces estás de enhorabuena. Según un estudio, esta bebida tan popular estimula la autofagia. El estudio analizó los efectos del café en ratones. De 1 a 4 horas después de tomar café, se observó un aumento en los procesos de renovación celular en órganos como el hígado, el corazón y los músculos.
Los investigadores creen que los polifenoles, unos compuestos aromáticos del café llamados, ayudan a mantener una buena salud porque promueven la autofagia.
El deporte
Ya sabes de sobra que el ejercicio mantiene el cuerpo y la mente en forma. Pero ¿el entrenamiento también puede desencadenar la autofagia? Para averiguarlo, unos científicos realizaron un estudio en ratones. Se alimentó a los animales con una dieta rica en grasas durante 13 semanas. Durante este período, los ratones se dividieron en 2 grupos. Mientras que el primero no tenía que realizar ninguna actividad física, el segundo debía ejercitarse con regularidad en una cinta de correr.
Con una dieta rica en grasas, los ratones aumentaron de peso, sus niveles en sangre se deterioraron y se inhibió la autofagia. El grupo de ratones deportivos obtuvo mejores índices de salud que el que no realizó ninguna actividad. Los resultados indican que los deportes de resistencia podrían estimular la autofagia y, por lo tanto, tener un impacto positivo en el nivel sanguíneo de los ratones.
La pérdida de peso
Si tu objetivo es perder peso, entonces necesitas tener un déficit calórico, es decir, gastar más energía de la que consumes. La importancia de este déficit depende de muchos factores personales, como la altura, el peso o la actividad física.
Además, el déficit calórico podría estimular la autofagia. Según un estudio, este fenómeno también podría ser el resultado de una deficiencia de nutrientes y un déficit calórico.
Importante: Cuando tienes un déficit calórico para perder peso, no te olvides nunca de cubrir tus necesidades de nutrientes. Así, tu cuerpo obtendrá todo lo que necesita para mantenerse saludable y continuar funcionando correctamente.
Autofagia: conclusiones
- La autofagia es un fenómeno natural que “limpia” las células endógenas. Con este fin, las sustancias nocivas u otros desechos celulares se descomponen en pequeñas moléculas y se reciclan.
- El Premio Nobel de Medicina de 2016 se lo llevó un científico que había estudiado la autofagia para poder combatir diversas enfermedades en el futuro.
- Las situaciones estresantes o las carencias de nutrientes, entre otros factores, pueden llevar a la autofagia.
- La autofagia y el ayuno intermitente están relacionados, porque durante el ayuno, el cuerpo utilizará sus propias reservas de energía. El papel de la autofagia es proporcionar al cuerpo los nutrientes necesarios durante una situación de emergencia.
- Algunos estudios afirman que este fenómeno también ralentiza el envejecimiento.
- Según algunas investigaciones, el ayuno intermitente, el café, el déficit calórico y el ejercicio pueden estimular la autofagia.
- Todavía no hay estudios a gran escala que determinen cuándo comienza la autofagia o qué desencadena exactamente. Se trata de un tema fascinante tanto para la ciencia en general como para la medicina en particular.
Fuentes del artículo
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- 1https://www.aerzteblatt.de/archiv/182779/Autophagie-Selbstverstuemmelung-als-Ueberlebensstrategie↩
- 2https://flexikon.doccheck.com/de/Autophagie↩
- 3https://flexikon.doccheck.com/de/Apoptose↩
- 4G. Marino et al. (2014) Regulation of autophagy by cytosolic acetyl-coenzyme A. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/24560926/↩
- 5https://prolon-fasten.com/blogs/beauty-health-nutrition/autophagie-wann-setzt-sie-beim-fasten-ein↩
- 6Sabrina Schroeder et al. (2014): Acetyl-coenzyme A: a metabolic master regulator of autophagy and longevity. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/24904996/↩
- 7Federico Pietrocola et al. (2014): Coffee induces autophagy in vivo. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/24769862/↩
- 8Parvin Ghareghani et al. (2017): Aerobic endurance training improves nonalcoholic fatty liver disease (NAFLD) features via miR-33 dependent autophagy induction in high fat diet fed mice. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/28163011/↩
- 9Guillermo Mariño et al. (2014): Caloric restriction mimetics: natural/physiological pharmacological autophagy inducers. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/25484097/↩
