Cambio de hora: Cómo afecta al organismo y cómo adaptarse con rapidez

El temido horario de invierno está a la vuelta de la esquina y afectará tu rutina. ¿Estás preparado?
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©Sneksy

El temido horario de invierno está a la vuelta de la esquina. ¿Estás preparado? Tener más luz por las mañanas, a cambio de que anochezca antes. Este es el resumen del cambio de hora que se pone en marcha en la próxima madrugada del sábado 28 al 29 de octubre. Esa noche, a las 03:00AM tendremos que retrasar el reloj a las 02:00AM. Este ritual, que hacemos dos veces al año, surgió en los 70 con la idea de hacer mejor uso de la luz del día y ahorrar energía. Ésta sigue siendo, en teoría, la razón por la que se mantiene, aunque cada vez se encuentra con más voces en contra. De hecho, el Parlamento Europeo apoyó en 2019 poner fin al cambio de hora estacional a partir de 2021, permitiendo a cada país elegir si mantienen el horario de verano o el de invierno. Los europeos también parecen tenerlo claro, ya que el 84% están a favor de abolir el cambio biannual, según una encuesta de la Comisión Europea realizada a 4,6 millones de ciudadanos.

El hecho es que, aunque a priori pueda parecer un cambio insignificante mover un poco las manecillas del reloj, resulta que esta pequeña variación tiene importantes efectos tanto en nuestra salud como en nuestro rendimiento deportivo. La Sociedad Española del Sueño (SES) anima a terminar con los cambios de hora “en base a evidencias científicas existentes” y, además, dejan clara su preferencia por el horario de invierno, ya que “promueve un ritmo biológico más estable que el del verano, lo que contribuye a mejorar el rendimiento intelectual y ayuda a disminuir la aparición de diversas enfermedades como las cardiovasculares, la obesidad, el insomnio y la depresión”.

Así pues parece que el cambio de horario parece tener los días contados, pero ¿qué es lo que sucede entonces? Pues que el tiempo va pasando y los distintos países no parecen ponerse de acuerdo para terminar con este sinsentido. Hasta que los gobiernos se pongan las pilas, hay formas de reducir el impacto que el cambio de hora tiene en el organismo. He aquí cómo.

Los efectos en nuestro rendimiento deportivo

Juan Ruiz López, entrenador personal residente en Madrid, ha recogido lo que sucede con nuestro cuerpo cada vez que nos toca cambiar la hora: “el cambio de hora altera nuestros ritmos circadianos relacionados con la regulación de la temperatura corporal, frecuencia cardiaca, producción de hormonas y excreción de electrolitos”. Unos ritmos que funcionan en nuestro organismo dependiendo de estímulos como que haya o falte luz, el horario de la comida, la actividad física o el sueño.

Con el horario de invierno, los días se vuelven más cortos, ya que oscurece antes. Las temperaturas bajan y los estímulos para hacer deporte, disminuyen. ¿A quién le apetece vestirse para salir a correr cuando está oscuro y hace frío? Desde la Asociación para el Autocuidado de la de la Salud (ANEFP), nos dan algunos consejos que puedes ver en este infográfico y también leer a continuación:

  • Fija un horario regular de sueño. Intenta acostarte y levantarte siempre a la misma hora, ya que esto te ayudará a conciliar el sueño.
  • Evita las cenas copiosas y procura no irte a la cama hasta que hayan pasado dos horas desde que ingeriste los alimentos.
  • Haz ejercicio de forma regular, pero nunca justo antes de acostarte.
  • Evita las siestas o, por el contrario, intenta que no sobrepasen los 20 minutos.
  • Reduce el consumo de cafeína y otras bebidas estimulantes.
  • No te expongas a la luz brillante de los dispositivos electrónicos, ya que esta puede causar problemas para conciliar el sueño.
  • Intenta que el ambiente donde duermes sea agradable, con un colchón y almohadas adecuados que te faciliten el descanso.
  • Antes de irte a dormir intenta hacer actividades relajantes: leer o escuchar música.

Para saber más sobre este tema en foodspring: 

Fuentes del artículo

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